Morán y su inspiración
Parecía un partido soso, y en realidad lo fue. Partido a las 9 y media de la noche, Copa del Rey, el Girona, suplentes, frío...... Así, que con estos alicientes comenzó el encuentro ante una entrada que a ojo de buen cubero, no superaba los 6000 espectadores. El Girona, con un equipo también plagado de suplentes comenzó teniendo el dominio del balón, aunque todas sus ocasiones durante la primera parte llegaron de tiros desde fuera del área, metiendo en este saco la ocasión más clara del partido producida por una falta al borde del área que el jugador gerundense estrelló el balón el la cruceta de la portería que anoche defendía Unai Alba.
Por su parte el Hércules, en el primer tiempo no hizo mucho más; su juego lo basó en una sucesión de centros al área rojiblanca esperando que el gol llegase en uno de los numerosos fallos al despejar del equipo catalán, desechando la posibilidad de tirar a puerta tanto dentro como fuera del área.
La segunda parte, parecía seguir por los mismos derroteros, y por ello, decidimos esperar a que una genialidad, en este caso de Morán, resolviese la eliminatoria a partido único. La genialidad llegó, y encima a disparo cruzado desde fuera del área sobre el minuto 58. El partido parecía encarrilado, pero a los 4 minutos del gol de Morán, el árbitro, en otra de sus deleznables actuaciones, decidió que César debía abandonar el terreno de juego. Entonces, Mandiá retrasó a Rodri, metió a Tote por Abrahán Paz (2 minutos antes de la expulsión), a Sendoa por Gerardo Noriega, y a Sergio Fdez. por Rubén Navarro, no muy lúcido en el día de ayer.
Entonces solo tocaba esperar, y aguantar los débiles arreones gerundenses sobre el área de Unai Alba, que llegaron como no, en forma de disparos desde fuera del área sin causar peligro alguno sobre la meta herculana. Así, el partido acabó con el 1 a 0 establecido por Morán.
Y ahora un primera.
.jpg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario