El postpartido

CHELSEA --- 4 /// LIVERPOOL --- 4

HOMENAJE AL FÚTBOL

El conjunto del Rafa Benitez llegó a tocar con la punta de los dedos la gesta

Jorge García González

Ya lo decía Reina en la previa del partido; será un partido difícil, pero lo que no dijo, es que fuese a ser un partido espectacular. 8 goles y otras tantas ocasiones han hecho de este encuentro de cuartos de final, el mejor partido de Champions en esta temporada hasta ahora, y posiblemente, hasta que esta acabe.

El partido comenzó con el estadio a reventar por la afición local y por otros tantos miles desplazados desde Liverpool, que hicieron de la grada todo un espectáculo. Pronto comenzaron los hechos cuando vimos cojear a Fernando Torres, el cuál, en el minuto 12 perdonó el primer gol tras un taconazo de Benayoun.
El gol no tardaría en llegar, en el minuto 19, una falta colgada del brasileño Fabio Aurelio, entraba suavemente en la portería debido a la mala colocación del meta checo Peter Cech.
El dominio total del Liverpool se plasmo en el marcador cuando en el minuto 27, el colegiado español Medina Cantalejo, señaló un penalty favorable a los “Reds” por supuesto agarrón de Ivanovic a Xavi Alonso. Él mismo, transformó el penalti, haciendo casi realidad el sueño.
Hiddink mientras tanto, no parecía ver las cosas muy claras, y decidió dar entrada al francés Nikolas Anelka en detrimento de Salomón Kalou.
Ya finalizando el primer tiempo, el Liverpool volvió a tener dos claras ocasiones, que podían haber supuesto la puntilla del partido; llegando así al descanso.

Tras la reanudación, eran otra vez los “Pools” quienes tenían la primera ocasión. Esta vez se debió a una mala salida de Cech que podía haber costado la vida del Chelsea.
Pero, como el fútbol es a veces injusto, descargó toda su ira contra el histórico Liverpool; y no podía haber sido de otra forma más humillante, que con un gol en propia meta. Un centro de Anelka sin aparente peligro, se convertía en gol tras un horroroso despeje de Reina que daba con el baló entre las redes azules.
El castillo de naipes comenzaba a venirse abajo junto a los ánimos de los liverpulianos, y era Drogba, quien avisaba a los 4 minutos de que querían más. A la siguiente jugada, Alex botaba un balón de falta con tal potencia que hizo inútil la estirada del español Pepe Reina.
Volvería a tener el Liverpool otro gol en sus manos pero esta vez la suerte se aliaría con Ivanovic. Desde ese momento, el encuentro entró en una dinámica frenética de goles y ocasiones como la que dos minutos después tendrían los londinenses. Un pase de la muerte de Drogba que culminaba Ballack con un tímido disparo que acababa en manos de Reina.
Sería en el minuto 75, cuando Lampard haría el 3 a 2 culminando una brillante remontada que parecía sentenciar las cosas ya de manera definitiva. Pero como os comentaba antes, el fútbol, además de ser injusto, es grande y espléndido.
En razón de 2 minutos Lucas Leiva y Dirty Kuyt daban la vuelta de nuevo al partido con sendos tantos que dejaban totalmente helados a los aficionados presentes en Stamford Brige. Todavía quedaba tiempo, haciendo de la eliminatoria una incertidumbre, ya que un gol del Liverpool clasificaría a los Reds.
Los 7 minutos restantes se convertirían en una pugna propia de aviadores de la RAF. Desgraciadamente para el Livepool y sus aficionados, la balanza se decantó hacia el lado del piloto Blue que derribaba con un gol de Lampard el avión liverpuliano y todo sueño europeo.
Tras esto, solo se dispuso de tiempo para otra clara ocasión de los pupilos de Rafa Benítez dispuestos si es necesario morir en la orilla.
Con el pitido final, una marabunda de jugadores Blues se abrazaban y felicitaban por el pase a las semifinales de la Copa de Europa donde ya les espera el FC Barcelona.

Espectacular.